https://www.youtube.com/watch?v=j_FJ-I7Qu8g
Autoridades de Universidad ORT Uruguay, docentes, funcionarios, graduados, familiares y amigos, tengan ustedes muy buenas tardes. Bienvenidos y gracias por estar aquí acompañándonos. Es un gusto para mí representar a los graduados de la Facultad de Comunicación y Diseño.
Quiero compartir con ustedes una historia, la historia de David.
David nació el 23 de junio de 1911 en Inglaterra. Al finalizar la preparatoria David logró ingresar a Oxford, una de las universidades más prestigiosas de la región. Sin embargo, al poco tiempo de comenzar, decidió abandonar sus estudios para viajar a Paris y convertirse en aprendiz de cocina, algo totalmente nuevo para él.
Su pasaje por Francia no fue muy largo y al poco tiempo regresó. Empezó a trabajar como vendedor de estufas de cocina. Algo que él nunca había hecho, sin embargo, sus ventas eran asombrosas; y esas estufas estaban a punto de cambiar su vida para siempre. David se convirtió en el mejor vendedor y su jefe le pidió que redactara un manual para compartir con otros vendedores.
David le mandó el manual a su hermano Francis, quien trabajaba como director administrativo en una reconocida agencia de publicidad en Londres. Lo contrataron como aprendiz y comenzó a trabajar junto a los demás ejecutivos de cuentas. Luego de unos años, David decidió que era hora de hacer un cambio. La agencia tenía algunos clientes americanos, por lo que convenció a sus superiores de enviarlo a Estados Unidos.
Diez años después, David fundaría su propia agencia y con el tiempo la transformaría en una de las más reconocidas del planeta.
La historia de David Ogilvy, es una de las historias de emprendedurismo más emocionantes del siglo XX. Y si bien su historia terminó el 21 de julio de 1999, su legado sigue vivo hasta el día de hoy.
Quiero compartir con todos ustedes un mensaje de David, uno que resume en gran parte su filosofía:
No bajen la cabeza
No se ubiquen en su lugar
Desafíen a los dioses
No cedan
No se rindan
No ganen premios de plata
No sean sumisos
No sean cobardes
No sean aduladores
Y recuerden siempre, las mejores ideas vienen como bromas. Hagan sus pensamientos tan graciosos como sea posible.
Felicitaciones a todos los graduados.
Muchas gracias.