Estudiar una carrera universitaria implica tiempo, dedicación y esfuerzo. Sin embargo, muchas personas combinan estudio con trabajo. Para esos casos, en Uruguay existe un beneficio clave: la licencia por estudio.
Pero, ¿qué es exactamente? ¿Cómo funciona? ¿Qué requisitos se deben cumplir? ¿Cómo saber si corresponde?
¿Todavía no tenés claro qué estudiar?
Conocé todas las carreras de ORT
¿Qué es la licencia por estudio?
Dentro de las licencias disponibles para los trabajadores en Uruguay, la licencia por estudio está pensada para trabajadores y trabajadoras que están cursando una carrera o curso, y buscan conciliar la vida laboral con la educación.
Es un derecho reconocido por la legislación uruguaya que otorga la posibilidad de disponer de tiempo libre remunerado o no remunerado para preparar exámenes, asistir a instancias académicas relevantes o continuar estudios formales.
Tanto en el ámbito público como privado, la licencia por estudio tiene sus particularidades dependiendo de cada caso. Por ejemplo, cuántos días corresponden, en qué condiciones, cómo se solicitan y qué comprobantes deben presentarse.
Más allá de los detalles técnicos, lo importante es entender que este derecho existe y puede ser solicitado por cualquier estudiante-trabajador que cumpla con los requisitos.
¿Por qué es relevante?
Pueden existir muchas razones por las que los estudiantes trabajen al mismo tiempo que estudian, tanto por necesidades económicas como por un interés personal por ganar experiencia laboral.
En un mundo donde cada vez más personas estudian y trabajan al mismo tiempo, la licencia por estudio se convierte en un recurso fundamental, ya que permite:
- Preparar exámenes con mayor tranquilidad.
- Asistir a evaluaciones o clases especiales en horarios donde con un trabajo de tiempo completo no hubiera sido posible.
- Organizar tiempos de estudio intensivo sin perder el empleo.
- Favorecer la continuidad académica y reducir la deserción estudiantil.
Pedir una licencia por estudio puede no solamente ofrecer más comodidad y flexibilidad a la hora de estudiar, sino también incrementar las posibilidades de avanzar más rápido en la carrera y, así, acceder a oportunidades profesionales para el futuro.
¿Quiénes pueden solicitarla?
La licencia por estudio está dirigida a trabajadores que se encuentren inscriptos en instituciones educativas reconocidas por el Estado.
Esto incluye:
- Estudiantes universitarios.
- Estudiantes de educación terciaria.
- Estudiantes de secundaria, UTU o formación técnica.
- En algunos casos, incluso cursos de capacitación y formación profesional avalados oficialmente.
El requisito básico es estar inscripto y presentar comprobante de exámenes o actividades académicas.
El número de días varía según la normativa aplicable y el sector.
En el sector privado, la ley establece un mínimo de 6 días hábiles por año para rendir pruebas, parciales o exámenes. Estos días pueden ser corridos o fraccionados, según la necesidad del estudiante.
En el sector público, algunos estatutos tienen beneficios mayores, que pueden llegar a 12 días hábiles o más, dependiendo del organismo y el cargo.
Es importante consultar siempre el convenio colectivo de cada sector o el reglamento interno del lugar de trabajo, ya que en muchos casos se otorgan beneficios adicionales.
- En la mayoría de los casos, la licencia por estudio es paga, lo que significa que el trabajador conserva su salario durante esos días.
- Existen situaciones en que los días pueden ser sin goce de sueldo, pero igual se garantiza el derecho a tomarlos.
Lo esencial es que nunca deberían ser contabilizados como vacaciones, ya que constituyen un beneficio aparte, vinculado al derecho a la educación.
- También te puede interesar: Cómo inscribirte a una carrera
Beneficios de estudiantes trabajadores
Más allá de la flexibilidad que ofrece, la licencia por estudio tiene otros beneficios que muchas veces pasan desapercibidos. Por ejemplo, permite a los estudiantes mejorar la planificación académica.
Contar con días específicos para preparar exámenes o preparar trabajos finales facilita distribuir mejor la carga de estudio a lo largo del semestre, evitando el estrés de última hora.
Es más sencillo conciliar compromisos laborales y personales. Al tener días reservados para estudiar, es más fácil mantener un equilibrio entre trabajo, familia y vida social, sin que ninguna área se vea afectada.
Disponer de una licencia por estudio incrementa la motivación y el compromiso. Saber que existe un derecho que respalda el estudio genera confianza en el trabajador y fomenta un sentido de responsabilidad, tanto académico como laboral.
Por último, se desarrollan habilidades de organización y gestión del tiempo. Al planificar con anticipación y coordinar con su empleador, el estudiante mejora competencias que luego serán muy útiles en su vida profesional.
Cómo solicitar la licencia por estudio
Con la información más clara sobre qué es la licencia por estudio y cómo funciona, es momento de responder a la pregunta clave: ¿cómo se pide este beneficio en la práctica?
Paso 1: Revisar la normativa aplicable
Antes de presentar una solicitud, es fundamental conocer las reglas que aplican a cada caso. Esto implica:
- Verificar si el contrato laboral o convenio colectivo incluye disposiciones específicas sobre la licencia por estudio. Algunos convenios establecen días adicionales o condiciones especiales según el sector o el cargo ocupado, por lo que revisar estos documentos evita malentendidos.
- Comprobar cuántos días se tienen disponibles en el sector específico. Conocer la cantidad exacta de días permite planificar mejor los períodos de estudio y los exámenes que se aproximan.
- Confirmar si la licencia es paga o no paga en cada caso particular. Esta información es clave para gestionar las finanzas personales durante el período de estudio.
Conocer esta información permitirá conocer los derechos de los estudiantes y evitar confusiones con sus empleadores.
Paso 2: Reunir la documentación necesaria
La preparación de los documentos correctos es esencial para que la solicitud sea aprobada sin inconvenientes.
- Es fundamental tener una constancia de inscripción en la universidad o centro educativo en el que se está cursando. Esta debe ser reciente.
- Calendario oficial de exámenes o parciales emitido por la institución, en el que se respalden las fechas importantes.
- En algunos casos, también se necesita una constancia de haber rendido la prueba después de la licencia.
En el caso de estudiantes universitarios, estos documentos suelen estar disponibles en el portal del estudiante o se pueden solicitar en bedelía.
Paso 3: Presentar la solicitud formal
La mayoría de las empresas piden que la licencia se solicite con varios días de anticipación. Lo recomendable es notificar al empleador por escrito (correo electrónico o formulario interno).
También es necesario especificar claramente la fecha o fechas solicitadas y el motivo (preparación de examen, rendición, u otras razones). Finalmente, solo queda adjuntar la documentación correspondiente.
Completar este paso con tiempo no es solamente un requerimiento de la empresa, sino también una manera de mantener un cronograma de estudio ordenado.
Paso 4: Confirmación y seguimiento
Una vez presentada la solicitud, el empleador debería aprobar y registrar la licencia. Esto asegura que la licencia quedó registrada y que no surjan inconvenientes posteriores.
En algunos casos, se pedirá constancia posterior de asistencia o examen rendido para cerrar el trámite. Es recomendable guardar copias de todo lo presentado y aprobado, ya que puede ser útil en caso de reclamos.
¿Todavía no tenés claro qué estudiar?
Conocé todas las carreras de ORT
Consejos para aprovechar la licencia por estudio
Pedir una licencia por estudio puede no solamente ofrecer más comodidad y flexibilidad a la hora de estudiar, sino también darte la oportunidad de organizar mejor el tiempo y aprobar los exámenes con menos presión.
Para sacarle el mayor provecho, estos son algunos consejos para tener en cuenta:
- Planificar con anticipación: es mejor no esperar al último minuto para pedir la licencia. Cuanto antes se le informa al empleador, más fácil será coordinarla.
- Ser estratégico: usar los días en las etapas donde más se necesiten (por ejemplo, para estudiar intensivamente o rendir más de un examen en una semana).
- Aprovechar el tiempo: la licencia no es un “descanso”, es un espacio para enfocarse en el estudio. Lo ideal es organizar un cronograma de repaso, materiales y ejercicios.
- Pedir ayuda si se necesita: las bibliotecas, tutorías o espacios de consulta de tu universidad están disponibles durante este período.
- Guardar siempre la documentación: las constancias, calendarios y aprobaciones formales protegen a los estudiantes ante cualquier reclamo.
Pedir la licencia solamente de forma verbal puede generar malentendidos, por lo que se recomienda siempre hacerlo por escrito. Se sugiere, además, no usar la licencia para otros fines que no sean de estudio, ya que es posible, que luego se necesiten esos días y ya no estén disponibles.
Una buena práctica es coordinar con los compañeros de trabajo de antemano, y dejar las tareas terminadas o encaminadas, para que no haya atrasos o imprevistos.
Evitar estos errores ayuda a que la licencia por estudio sea un recurso respetado y valorado en la empresa.
- Te recomendamos: Cómo mantener el equilibrio entre estudio y trabajo: consejos para estudiantes trabajadores
La licencia por estudio en Uruguay es un derecho que busca equilibrar el mundo académico con la vida laboral, garantizando que quienes trabajan puedan continuar su formación sin obstáculos.
Saber cómo funciona, qué documentación presentar y cómo solicitarla correctamente puede marcar la diferencia en el rendimiento universitario.
Trabajar y estudiar al mismo tiempo, en ocasiones puede tener sus propios obstáculos, pero saber cuándo pedir una licencia por estudio, y cómo aprovecharla de la mejor manera, puede reducir el estrés, mejorar la organización personal y dar mayor confianza a la hora de rendir.
¿Todavía no tenés claro qué estudiar?
Conocé todas las carreras de ORT